Consecuencias de las acciones de compensación
En la actualidad uno de los fallos más comunes que evitan que las personas logren sus objetivos son las acciones de compensación, es decir por ejemplo hoy me salto la dieta y mañana como menos, hoy no voy al gimnasio, pero mañana hago el doble o el típico “de perdidos al rio” que por fallar en una comida te da la libertada de poder como lo que quieras con la excusa de que ese día ya no cuenta y mañana no comer.
Es un error de lo más frecuente que puede tener consecuencias muy negativas tanto para nuestros objetivos como para nuestra salud pudiéndonos causar trastornos de la conducta.
La realidad es, que esos tipos de pensamientos de compensación el único resultado que nos dará será que nos acostumbremos a saltarnos nuestra dieta o nuestra programación ya que nos estaremos justificando cada vez que esto ocurra con comportamientos compensatorios. Además de que nos sentiremos con sensación de culpa y un estado de ánimo bajo.
¿Qué debemos hacer cuando nos saltamos la dieta, el entreno o la programación establecida?
Lo primero es mantener la calma ya que probablemente esto no significa que hayamos tirado el progreso de toda la semana por la borda ni que nos vaya a afectar en nuestros objetivos. Lo que debes hacer después es seguir con tu día a día y con lo que te toque, es decir sin bajarte las cantidades de tu comida, sin saltarte comidas, sin hacer el doble de ejercicio,… Simplemente seguir con lo que toca.